Manos crispadas me confinan al exilio.
Ayúdame a no pedir ayuda.
Me quieren anochecer, me van a morir.
Ayúdame a no pedir ayuda.(Alejandra Pizarnik)
No voy a pedir ayuda, pero es cierto que se está anocheciendo todo. El verano siempre es así, un poco sombrío, un poco extraño. Y yo estoy cansada de persistir, siempre del lado de lo correcto. Estoica. Aislada y segura como la roca.
1 comentario:
No estoy de acuerdo contigo, Bicho. El verano no es sombrío ni tiene por qué ser extraño... Disfruta de lo que tienes a mano, playa, sol, olas, arena, que luego se echa de menos.
Un abrazo,
Miguel
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