jueves, 16 de junio de 2011

Fantasmas

Entonces todo se reduce a una pregunta, ¿no?, dice Azul, olvidándose por completo de Nieve y mirando a Negro directamente a los ojos. ¿Sabe él que usted le está observando o no?

Negro vuelve la cabeza, incapaz de seguir mirando a Azul, y dice con voz repentinamente temblorosa: Por supuesto que lo sabe. Ésa es la cuestión, ¿no? Tiene que saberlo, de lo contrario nada tendría sentido.

¿Por qué?

Porque me necesita, dice Negro, aún mirando hacia otro lado. Necesita mis ojos mirándole. Me necesita para demostrar que está vivo.

(Trilogía de Nueva York, Paul Auster)



*/ Por fin he retomado (y terminado) La Trilogía de Nueva York. Y de momento a mi Auster, ni fú, ni fá...

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