domingo, 14 de agosto de 2011

Jmj


Los Hooligans de Dios ya han tomado Madrid.

Tengo la impresión de que ser guardián de la fe es un negocio más que rentable. Allá donde voy, cientos, miles, de "voluntarios" ataviados con sus camisetas de los sponsor oficiales, están prodigando su amor al mundo, su solidaridad y su caridad cristiana. Atrás quedó esa exaltación de la fe de guitarra, evangelio y pandereta; porque los nuevos católicos son más, son modernos y están patrocinados.

Su fe, perdón LA fe, (la única y verdadera, claro), ahora utiliza las redes sociales, vuela en Ryanair y tiene descuentos especiales en espectáculos, transportes y alojamientos varios. Y no, no todo es misa y amor fraternal, porque el marketing papal ha sabido renovarse y ahora se prodiga en playas (esos antiguos espacios de depravación y pecado carnal), parques de atracciones y pistas de baloncesto.

Así que no os dejéis engañar chicos, la fe es buena, ¿¿qué son unos cuántos domingos de sopor eucarístico a cambio de unas vacaciones pagadas a todo trapo??

Así que mientras observo el derroche y la ostentación con el que la Iglesia Católica está invadiendo Madrid, caigo en la tentación de hacer uso de la demagogia barata y no puedo evitar pronunciar en la misma frase, cuerno de África, VIH, tesoros del Vaticano. Y me reafirmo en la creencia de que la fe, al final, es sólo un negocio demasiado próspero y corrupto, llenando los bolsillos de aquellos que en realidad no la necesitan.




P.D.- Sólo se me ocurre una manera eficaz de combatirlos: Pecad, pecad, malditos, condenémonos todos!!!!^^

1 comentario:

Darthpitufina dijo...

Y los trayectos de Cercanías modificados, y las calles cortadas, y el menú peregrino de moda, y el dinero que no proviene del Vaticano derrochado.

Y todo porque además de Papa se supone que es Jefe de Estado, ¿no?

Si viniera otro, ¿se armaría el mismo lío? Lo dudo.

Una sonrisa.