jueves, 1 de marzo de 2012

Las aguas de Leteo

...Ahora bien,
si poco a poco dejas de quererme
dejaré de quererte poco a poco.

Si de pronto
me olvidas
no me busques,
que ya te habré olvidado...

(Pablo Neruda)


Thomas Benjamin Kennington
The waters of Lethe

Este es el trato: Tú vas a seguir fingiendo que me has olvidado y yo voy a consentirlo.

Pero quiero que una cosa quede bien clarita. Soy yo quien te está dando una tregua. Te dejo vivir en tu mundo de trampas, en el que aparentemente yo no existo, pero los dos sabemos que es mentira.

No voy a pedir explicaciones, ni disculpas, no voy a razonar contigo ni a tratar de retenerte. Te dejo huir con tus propósitos y tus miedos; sin condiciones.

Te doy de beber, de mi propia mano, todo el agua del Leteo.

Y si finalmente lo logras, quiero decir, si finalmente me olvidas, ten en cuenta que he sido yo quién firmó tu carta de libertad. Recuerda que fui yo quien permitió que te marcharas y giré la cabeza como si no me importara. Recuerda que los grandes amores, los amores de verdad, no piden nada, todo lo dan, aunque duela. Y también en esto te llevo ventaja...

3 comentarios:

Andrea dijo...

¡Quien pudiera gritar al viento que su amor es tan profundo que vive ofreciendo esa libertad a la persona que ama!
Pero que lícito es a la vez luchar por ese amor.
¿Y cuándo tratamos de retener junto a nosotros a un amor que en realidad no nos pertenece?
¡Cuánto dolor podemos generar! ¡Y cuántas consecuencias no deseadas para todos!
Besos.

evita dijo...

Quien pudiera beber de ese agua, realizando un guion para dejar los pensamientos bonitos, quizás en lo mas profundo del alma, el color rosa sea una imagen distorsionada de recuerdos tristes borrados, quizás solo seamos felices cuando esa capa se congela y no deja salir ninguno de los recuerdos que lo mantienen a flote.Somos lo que somos, vivimos lo que esta escrito, pero si pudiera cambiaria mi guion, para ponerlo a tu lado.

Cuanto te leo, eres mi color rosa.

Bicho dijo...

Uy, una nueva!!! xD

Tienes mucha razón Andrea, pero ahí radica la diferencia entre amar...y amar bien! ;)
Bienvenida!!!

Evita, si tuviera la oportunidad de borrar mi memoria, incluso seleccionando sólo aquellos malos recuerdos, no lo haría. No quiero olvidar ni un sólo detalle de mi vida, ni el más pequeño, ni el más doloroso. Esos momentos tristes también nos enseñan. Nos hacen valorar más los momentos buenos, apreciar las cosas cotidianas. Aunque parezca contradictorio, son las heridas, muchas veces las que nos enseñan a seguir adelante y buscar la felicidad. Me gusta ser tu color rosa, pero no desesperes, seguro que encuentras más colores a tu alrededor. Ya sabes que te adoro! Ánimo campeona!

Besos a las dos!

BichO