sábado, 13 de septiembre de 2008

A veces

(José de Togores)


A veces
alguien te sonríe tímidamente en un supermercado
alguien te da un pañuelo
alguien te pregunta con pasión qué día es hoy en la sala de espera del dentista
alguien mira a tu amante o a tu hombre con envidia
alguien oye tu nombre y se pone a llorar.


A veces
encuentras en las páginas de un libro una vieja foto de la persona que amas y eso te da un tremendo escalofrío
vuelas sobre el Atlántico a más de mil kilómetros por hora y piensas en sus ojos y en su pelo

estás en una celda mal iluminada y te acuerdas de un día luminoso
tocas un pie y te enervas como una quinceañera
regalas un sombrero y empiezas a dar gritos.

A veces
una muchacha canta y estás triste y la quieres
un ingeniero
agrónomo te saca de quicio
una sirena te hace pensar en un bombero o en un equilibrista
una muñeca rusa te incita a levantarle las faldas a tu prima
un viejo pantalón te hace desear con furia y con dulzura a tu marido.

A veces
explican por la radio una historia ridícula y recuerdas a un hombre que en vida fue tu amigo
disparan contra ti sin acertar y huyes pensando en tu mujer y en tu hija
ordenan que hagáis esto o aquello y enseguida te enamoras de quien no hace ni caso
hablan del tiempo y sueñas en una chica egipcia
apagan las luces de la sala y ya buscas la mano de tu amigo.

A veces
esperando en un bar a que ella vuelva escribes un poema en una servilleta de papel muy fino
hablan en catalán y quisieras de gozo o lo que sea morder a tu vecina
subes una escalera y piensas que sería bonito que el chico que te gusta te violara antes del cuarto piso
repican las campanas y amas al campanero o al cura o a Dios si es que existiera
miras a quien te mira y quisieras tener el poder necesario para ordenar que en ese mismo instante se detuvieran todos los relojes del mundo.

A veces
sólo a veces gran amor.


(José Agustín Goytisolo)



Es imposible mantener el formato original del poema en este bichoblog tan estrechito. Llevo toda la mañana pensando en Goytisolo y en cómo hay personas y situaciones que no cambian aunque debieran y otras que tristemente cambian, aunque no debieran. Paradojas.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Ese cuadro es el favorito de mi hermana ;)

Evita dijo...

hola cariño.

A veces los que no queremos cambiar lo hacemos por culpa de los que deben cambiar y no lo hacen.

A un arriesgo de parecer egocentrica y edonista, (aunque tu que me conoces sabes que no soy asi, o por lo menos lo intento) Te comento, si una persona te llama el dia del funeral de tu abuela, media hora antes, y te coge con pañuelo en mano, vestida de negro, y mirando las flores que les vas a poner en el nicho, tu piensas que te va a dar el pesame, o te va a preguntar ¿que tal estas? (aunque paradojicamente, sepa que es uno de los dias mas jodidos de tu vida), pero no es asi, te llama para decirte que acaba de vender una perrita por 700 euros, y tu dejas el telefono encima de la mesa, para irte a la misa, porque no quieres escuchar "su pena" en ese momento.

Cosas asi hacen que yo cambie, porque me hacen ver a ciertas personas como lacras para la sociedad, no son validas, no aportan nada, tan solo son esos bultos que ven los miopes cuando no llevan gafas puestas.

Asi que por desgracia la gente cambia por culpa de quien no cambia y deberia cambiar.

Un beso y mil veces gracias por ser como eres.

Bicho dijo...

Lyra... tu hermana tiene muy buen gusto, lo sabes,no? Jejejeje! Me alegra que te dejes caer por aquí!

Evita, lo triste es que la gente que cambia, se pliega ante las evidencias y niega la transformación. Los que tienen conciencia del cambio, como tú, son unos pocos. A mi me sigues pareciendo la misma, que te protejas ante los demás, no influye en nuestra amistad. Espero que siga siempre así.

Besos a las dos!