Olvidemos
el llanto
y empecemos de nuevo,
con paciencia,
observando a las cosas
hasta hallar la menuda diferencia
que las separa
de su entidad de ayer
y que define
el transcurso del tiempo y su eficacia.
¿A qué llorar por el caído
fruto,
por el fracaso
de ese deseo hondo,
compacto como un grano de simiente?
No es bueno repetir lo que está dicho.
Después de haber hablado,
de haber vertido lágrimas,
silencio y sonreíd:
nada es lo mismo.
Habrá palabras nuevas para la nueva historia
y es preciso encontrarlas antes de que sea tarde.
(Ángel González)
Y eso es lo importante. Encontraremos un nuevo camino, no te preocupes.
2 comentarios:
Nena, gracias, gracias, gracias, como siempre me demuestras, como siempre me has demostrado y como puedo estar totalmente segura que siempre me vas a demostrar, es que nunca jamás me sentire sola, mientras tu estes ahi conmigo, sea lejos o cerca, el hecho de oir tu voz, hace que los kilometros sean granos de arena, saltables en cualquier momento para poder sentir la calidez de tus palabras.
Ahora mismo solo se me ocurre decirte que "ERES MI AMIGA, ERES MI HERMANA, ERES TÚ" mi niña, mi bicho, mi confidente, y la que conoce todos mis secretos, te quiero nena, te quiero muchisimo.
BESUKIS GRANDOTES PARA TI Y EL SR, CALAMAR
Un besote, guapa. Ojalá todos los cambios a los que te estás enfrentando ahora te reporten cosas positivas.
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